Hoy fui a la nieve, con mi familia. No íbamos con la ropa adecuada, pero aún así lo pasamos muy bien. Fue un viaje algo largo, ya que mi papá se perdió (sólo un poco).
Mi mamá en el camino iba contando una anécdota de cuando fue con un grupo de amigos en un bus, hace mucho tiempo, y que el bus no tenía cadenas para la nieve. Cuando iban subiendo no hubo mayor problema. Pero, al momento en que tuvieron que bajar, se avecinó una tormenta, haciendo del terreno un poco peligroso para los automóviles que debía descender. Y como el bus en donde iban mi mamá, tío y amigos, no tenía cadenas, al momento de tratar de bajar por las curvas, el bus se deslizaba más de la cuenta. Por lo cual, junto con la ayuda de los "tíos carabineros" que les dijeron que tenían que bajar si o si (eso quería decir que obviamente no se podían quedar ahí por siempre esperando al bus). Bajaron las curvas tomados de la mano, en "filita", asustado (¡quien no!), y si uno se caía, se caían todos los que seguían. Lograron llegar al refugio de los "tíos carabineros" y ahí "fuera de peligro" esperaron a que pudiera bajar el bus. Luego una vez en la capital, este bus tuvo que dejar a cada uno de sus pasajeros en la puerta de sus casas, dado a la hora y a la molestia de los padres de estos niños que ahora ya son adultos.
Le puse tanta atención a la historia de mi mamá que no me di cuenta en el momento en que habíamos llegado a las curvas. Mi mamá nos dijo a mis hermanos y a mi "son 21 curvas" y no eran para nada 21 CURVAS! Desde la curva 22 las empecé a contar, me estaba desesperando, no estaba mareada ni nada, pero era desesperante el hecho de que ¡nunca se acabaran! Finalmente, terminaron las curvas eran 39? (ya no lo recuerdo) Llegamos y vimos mucha nieve, como siempre habíamos ido a las partes que están cerca del Cajón del Maipo y ahora como fuimos hacía el otro lado, era un lugar nuevo (para todos, menos mi mamá)
Nos bajamos del auto y nos dimos cuenta de que había DEMASIADA GENTE y ¡MUCHO SOL! (estaba mucho más rico allá con la nieve que aquí en la capital :( Mi papá les arrendó unos trineos a mis hermanos, él dijo que había arrendado 2 para que nos turnáramos, pero no creo. En fin, mis hermanos llegaban a volar de la velocidad que esta tabla podía alcanzar, así que me fui a tirar, iba subiendo, hasta que en una parte, (después de ver como el peso de mi hermano se le fue todo para un lado y se cayó) en donde descubrí que si me movía, me convertiría en una bola de nieve y a nadie le hubiese importado que hubiera muerto. So, llamé a mi hermano (¡muy bien!) para que me socorriera, de tal manera que si pude ponerme al medio y sentarme y finalmente tirarme. Iba demasiado fuerte, nadie se cruzó en mi camino, which is good. Pero una vez que llegué abajo, me ahogué. No podía hablar y claramente NO ME PODÍA CALMAR.
Después de eso, no me tiré más. Dejando a mis hermanos libres. Me fui a sentar con mi mamá a comer hielo, era asqueroso, pero tenía sabor a unos granizados que venden en la Copa Francia en el Stade Francais, así que el sabor era familiar, en realidad, solo le faltaba el jarabe de fruta jajajaja.
Me senté en una tabla en el momento en que mis hermanos y mi papá trataron de construir un muñeco de nieve, los miré y dormité un rato. Es que, en realidad había como tanta "tranquilidad" (dado a la cantidad de personas que había). Era como estar en la playa tomando sol, se escuchaba el ruido de atrás, así como si los niños estuvieran chapoteando en el mar.
Después de eso, comenzó a hacerse tarde, teníamos que bajar antes de que se formara un taco en las curvas. Habían caballos sueltos en medio de las curvas, en medio de las dos pistas que habían para bajar. Estuve solo un rato despierta, luego me dormí lo que quedaba de camino en el auto (siempre he encontrado que el auto es un lugar muy cómodo para dormir), hasta que llegamos a una gasolinera a comprar bebida, fue en ese entonces en que mi felicidad volvió, porque puta que estaba seca.
Luego de eso fuimos al mall a comer comida llena de grasa, por donde se le mirara (pero es tan rica) y luego llegamos a un lugar muy helado llamado casa y aquí estoy dándoles a conocer que estas vacaciones parecen prometer grandes cosas, pero no hay que confiarse mucho (:
Nos bajamos del auto y nos dimos cuenta de que había DEMASIADA GENTE y ¡MUCHO SOL! (estaba mucho más rico allá con la nieve que aquí en la capital :( Mi papá les arrendó unos trineos a mis hermanos, él dijo que había arrendado 2 para que nos turnáramos, pero no creo. En fin, mis hermanos llegaban a volar de la velocidad que esta tabla podía alcanzar, así que me fui a tirar, iba subiendo, hasta que en una parte, (después de ver como el peso de mi hermano se le fue todo para un lado y se cayó) en donde descubrí que si me movía, me convertiría en una bola de nieve y a nadie le hubiese importado que hubiera muerto. So, llamé a mi hermano (¡muy bien!) para que me socorriera, de tal manera que si pude ponerme al medio y sentarme y finalmente tirarme. Iba demasiado fuerte, nadie se cruzó en mi camino, which is good. Pero una vez que llegué abajo, me ahogué. No podía hablar y claramente NO ME PODÍA CALMAR.
Después de eso, no me tiré más. Dejando a mis hermanos libres. Me fui a sentar con mi mamá a comer hielo, era asqueroso, pero tenía sabor a unos granizados que venden en la Copa Francia en el Stade Francais, así que el sabor era familiar, en realidad, solo le faltaba el jarabe de fruta jajajaja.
Me senté en una tabla en el momento en que mis hermanos y mi papá trataron de construir un muñeco de nieve, los miré y dormité un rato. Es que, en realidad había como tanta "tranquilidad" (dado a la cantidad de personas que había). Era como estar en la playa tomando sol, se escuchaba el ruido de atrás, así como si los niños estuvieran chapoteando en el mar.
Luego de eso fuimos al mall a comer comida llena de grasa, por donde se le mirara (pero es tan rica) y luego llegamos a un lugar muy helado llamado casa y aquí estoy dándoles a conocer que estas vacaciones parecen prometer grandes cosas, pero no hay que confiarse mucho (:
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